Una tormenta mágnetica ocurre cuando el Sol expulsa miles de millones de partículas que son producto de erupciones, y estas llegan a la Tierra en forma de viento solar. Pues, según el Laboratorio de Astronomía Solar de Rayos X del Instituto Físico de la Academia de Ciencias de Rusia, este fenómeno golpeará otra vez el planeta el próximo 18 de marzo.
La magnestosfera (capa formada por la interacción del magnetismo de la tierra y el viento solar) estará en calma, pero tres días antes de la tormenta, el 15, 16 y 17 marzo, se experimentarán alteraciones geomagnéticas. Esto se logró determinar gracias a el Instituto Lebedev, que pertenece a la Academia Rusa de Ciencias.
Las partículas solares cargadas se moverán hacia la Tierra y podrían interrumpir las redes eléctricas, las naves espaciales y las operaciones satelitales. Además, ocasionan las auroras boreales y calentamientos en las capas altas de la atmósfera, eso significa que podría interferir también en las telecomunicaciones.
No pasará nada grave así que no hay de que alarmarse, solo hay advertencias de que esto podría interferir en las redes de comunicación, internet, rutas aéreas y marítimas.