Shaquille O’Neal (49) es uno de los exjugadores más ricos de la NBA, con un patrimonio que asciende a los 400 millones de dólares. El atleta amasó su fortuna con patrocinios, contratos extraordinarios con marcas y derechos de imagen. Una vez finalizada su carrera deportiva, allá por 2011, siguió multiplicando su caudal a tal punto que se convirtió en un emblema de los negocios. Sin embargo, ahora intenta educar a sus hijos para que hagan su propio camino y no cuenten con su dinero.
A través de un podcast, el exbasquetbolista reveló la razón por la que no piensa compartir su fortuna con sus seis hijos. “Mis hijos son mayores ahora. Se enojaron conmigo; yo no estoy realmente molesto con ellos, pero no entienden. Les digo todo el tiempo que no somos ricos, yo soy rico”, confesó en Earn Your Leisure.
En 2021, O’Neal se convirtió en uno de los atletas más adinerados del mundo, según la revista Forbes, pese a que su carrera deportiva finalizó hace una década. El atleta gana entre 20 y 25 millones de dólares al año por los contratos que tiene con empresas como Icy Hot, Gold Bond, Buick y Zales. Su extensa carrera empresarial no termina ahí: de acuerdo con ese medio, el exjugador de Los Angeles Lakers es copropietario de 155 restaurantes Five Guys Burgers, 17 restaurantes Auntie Annie’s Pretzels, 150 lavaderos de autos, 40 gimnasios de 24 horas, un centro comercial, un cine y varios clubes nocturnos de Las Vegas.
“Tenés que tener una licenciatura o una maestría y luego, si querés que invierta en una de tus empresas, vas a tener que presentármela”, explicó que le dijo a cada uno de sus herederos, durante la entrevista que fue difundida en los últimos días en las redes sociales. En ese sentido, sostuvo que siempre le hace saber a sus hijos que el dinero que ganó a lo largo de su vida es suyo: “No te voy a dar nada”.
Sobre el futuro de Shareef, Shaqirl, Me’arah, Myles, Taahirah y Amira O’Neal, indicó: “Hay una regla: la educación. No me importa si jugás al básquet. No me importa nada de eso. Tengo seis hijos. Me gustaría tener un médico, un farmacéutico, un abogado, alguien que sea dueño de un fondo de inversión, alguien que sea dueño de varios negocios y que se haga cargo de los míos. Pero les digo que no se los voy a dar: tienen que ganárselo”.