El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció una nueva cuarentena total para combatir la pandemia frente al auge de una nueva cepa de coronavirus más contagiosa que incluirá el cierre de las escuelas.
El mandatario detalló que a partir del “riesgo de que los servicios de sanidad se vean superados”, los ciudadanos deberán quedarse en casa salvo para cuestiones básicas a partir del miércoles y al menos hasta mediados de febrero.
Escocia anunció poco antes un confinamiento total desde medianoche y durante todo enero, mientras que Gales e Irlanda del Norte, las otras dos naciones de Reino Unido, ya estaban bloqueadas.
“Inglaterra debe entrar en un bloqueo nacional lo suficientemente fuerte como para contener esta variante”, aseguró durante el discurso que brindó este lunes.
El nuevo confinamiento vendrá acompañado del cierre de las escuelas primarias, secundarias y universidades de Inglaterra que pasarán a funcionar de manera remota a partir de este martes, excepto para los hijos de trabajadores esenciales y los niños vulnerables.
Los casos de Covid-19 aumentaron drásticamente en Reino Unido en las últimas semanas, impulsados por una variante nueva y más contagiosa del virus.
El domingo hubo casi 55.000 nuevos casos y en total han muerto ya más de 75.000 personas en el país, la segunda cifra más alta de Europa.