Luego de las críticas y controversias que la princesa Mako de Japón tuvo que afrontar por su decisión de contraer matrimonio con un plebeyo, parece ser que finalmente triunfó el amor, ya que la boda con su prometido Kei Komuro, está próxima a concretarse. Aunque aún no se confirmó la fecha, se estima que será en octubre.
La princesa Mako, nieta de 29 años del emperador Akihito, había anunciado su compromiso en 2017, y al año siguiente iba a realizar la boda con un compañero de la universidad que conoció mientras cursaba sus estudios en la Universidad Cristiana de Tokio.
Sin embargo, sus deseos se vieron frustrados debido al escándalo que generaron ciertos problemas económicos de la madre del novio -su expareja afirmaba que esta le debía más de 4 millones de yenes (aproximadamente 31.000 euros)-. Entonces, la pareja anunció que necesitaban más tiempo para planificar su futuro juntos.
Y finalmente ese día llegó. Dos años después de marcharse a Estados Unidos, Komuro regresó al país con un cambio de look relajado e informal que llamó la atención de la prensa.
Luego de cumplir con las medidas que establece el protocolo por la pandemia de coronavirus, el joven abogado se pondrá en marcha para ultimar los preparativos de la ceremonia, en la que darán el sí. De acuerdo a lo trascendido, el festejo no contará con ritos ancestrales que son tradición de la Familia Imperial. Según sostuvieron medios japoneses, una vez casados la pareja planea mudarse a Estados Unidos, precisamente Nueva York.
La princesa renunció a US$ 1 millón por amor
La princesa Mako de Japón no va a recibir un pago único de US$ 1 millón por haber renunciado a su estatus real para cumplir su sueño y casarse con su compañero de universidad, según dijeron los medios locales el sábado.
Aunque los miembros salientes también tienen derecho a un pago único, el gobierno está dispuesto a acordar que la princesa renuncie al pago, por valor de hasta 150 millones de yenes (US$ 1,35 millones) que se otorga a las mujeres de la Familia Imperial que abandonan la Casa Real tras casarse.
Cabe destacar, que aunque resulta inusual, este tipo de casos ya ocurrió. Es que Mako será la tercera princesa en tomar la decisión de dejar la familia real para poder casarse con su pareja. La primera vez ocurrió en 1960, cuando lo hizo la tía abuela de Mako, y la segunda en 2005, cuando lo hizo su tía Nori.
