Araceli Benítez pudo ganarse un lugar en una de las grandes compañías norteamericanas a las que muchos aspiran llegar, los esfuerzos para estar como colaborador es todo un reto y la compatriota lo pudo alcanzar.
Con el objetivo de ampliar sus horizontes profesionales y tras haberlo soñado durante mucho tiempo, Benítez se animó a perseguir su sueño, sin importar los intentos que debía realizar. Instalada en Boston y con apenas tres meses de vivir allí supo cómo desempeñarse.
En la tarde de Venus conocemos su historia y de qué trata esta aventura.
Mirá la entrevista completa a continuación: