El futbolista y su padre fueron condenados por haber defraudado 4,1 millones de euros durante 2007, 2008 y 2009 por los derechos de imagen del futbolista.
La Audiencia de Barcelona condenó a padre e hijo a 7 meses de cárcel por cada uno de los tres años. Además, Messi tendrá que pagar multas por más de 2 millones de euros por los tres años, y su padre 1,5 millones.