Lady Gaga detuvo el show al ver que una seguidora estaba sangrando tras golpearse la cara durante un concierto en EE.UU. La cantante quiso asegurarse que los médicos estaban atendiéndola como corresponde.
Como puede verse en un vídeo, grabado por un asistente, Gaga le preguntó a la fan si está bien, antes de continuar con el show.
Tras el percance, le dedicó a la seguidora uno de sus primeros éxitos, Paparazzi.