La Cámara de Diputados aprobó ayer martes la ley de financiamiento político, pero con la versión impuesta por las bancadas de la ANR. La idea original era que cada candidato haga una rendición de cuenta de su campaña electoral de manera individual. Sin embargo, quedó totalmente deshecha.
“Lastimosamente la intención inicial que era preservar la transparencia, queda trunca. Vuelve a tomar protagonismo de esta manera en los partidos el dinero mal habido que proviene del narcotráfico”, criticó lamentó Kattya González, diputada del Partido Encuentro Nacional (PEN), en contacto con La Unión, recordando que el proyecto también incluía trazabilidad de fondos de las campañas electorales desde las internas partidarias.
Los votos fueron 37 contra 27, en el que los colorados impusieron su propuesta para que solo los movimientos y partidos rindan cuentas de su dinero en las campañas electorales y no los postulantes. Así mismo, consiguieron que la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (SEPRELAD) no intervenga en controles a los candidatos.
“El ciudadano tiene el derecho de saber de dónde sacan los candidatos a cargos públicos el dinero para sostener sus campañas”, expresó González, cuestionando que esto se pretenda quitarle al ciudadano.
No obstante, la legisladora no quiere perder la esperanza, aguardando que en la Cámara de Senadores se revea el proyecto y sea aprobada la idea original.
FUENTE: LA UNION