A más de veinte años del final de la primera película de Jumanji, cuatro estudiantes de la preparatoria son castigados para limpiar el sótano de su escuela, durante su detención, descubren una vieja consola donde insertan un videojuego de la versión del juego de mesa original de la primera película que los absorberá en un mundo virtual en la selva (en donde quedó atrapado Alan Parrish) en forma de avatar y la única salida es jugar y terminarlo.
La nueva versión de Jumanji fue una de las más criticadas por los cineastas y hoy esta en el puesto número 1 de las películas más vendidas demostrando así que los comentarios están de más cuando hay un trabajo bien hecho.
Se mantiene en el primer lugar por segundo fin de semana consecutivo de la taquilla, con ingresos de 81 millones de dólares.