El gobierno de Estados Unidos planea requerir que casi todos los extranjeros que visiten la nación estén vacunados contra el COVID-19, informó el miércoles 4 de agosto un funcionario de la Casa Blanca.
El requisito surgiría como parte de un enfoque gradual del gobierno del presidente Joe Biden para reducir las restricciones de viaje a los extranjeros. De momento no se ha determinado un calendario, ya que los grupos de trabajo interdependencias estudian cómo y cuándo avanzar con seguridad hacia la reanudación de los viajes normales, pero eventualmente se tiene previsto que todos los extranjeros, con algunas excepciones limitadas, deberán estar vacunados contra el COVID-19 para ingresar al país.
El gobierno de Biden mantiene en vigor ciertas restricciones de viaje que disminuyeron los vuelos internacionales hacia Estados Unidos, con el argumento de la propagación de la variante delta del coronavirus. Bajo esas normas, los extranjeros que hayan estado en China, en el espacio Schengen, en Gran Bretaña, Irlanda, Brasil, Sudáfrica y la India en los 14 días previos tienen prohibida la entrada a territorio estadounidense.
Todos los viajeros a Estados Unidos, independientemente de su estatus de vacunación, deben mostrar una prueba negativa de COVID-19 realizada en los tres días anteriores a su vuelo.
El gobierno de Biden ha enfrentado presiones para retirar algunas restricciones por parte de aliados, la industria aérea y familias que han estado separadas de sus seres queridos a causa de las normas. Muchos se han quejado de que las restricciones de viaje no reflejan la situación actual del virus, sobre todo porque el número de infecciones en Estados Unidos es peor que el de muchas naciones que tienen prohibido el ingreso.
