Conrad Murray, el médico que fue encarcelado con motivo de la muerte de Michael Jackson, afirma que el cantante fue “castrado químicamente”por su padre para mantener su tono de voz cuando aún era niño.
En una grabación, el médico califica a Joe Jackson como “uno de los peores padres en la historia” y dice que “el hecho que él [Michael] fuera castrado químicamente va más allá de las palabras”.
Su afirmación sobre la castración química se basa en los alegatos de que Michael recibió inyecciones de hormonas para retrasar la pubertad y mantener su voz aguda.
Según Murray, el cantante aprovechaba los ratos que pasaban juntos durante los tratamientos para sincerarse con él, contándole los horrores que pasó junto a su padre. En la grabación el médico solo le desea una cosa al padre de Michael Jackson, que “encuentre la redención en el infierno”.
Conrad Murray cumplió dos años en prisión tras ser acusado de homicidio involuntario por la administración de una dosis letal de anestésico al famoso músico en junio de 2009.