Diaz, que hace pocas fechas anunciaba su regreso a la actuación junto a Jamie Foxx tras ocho años de parón, vivió una situación surrealista.
Antes, mucho antes de que Cameron Diaz (49) se convirtiera en una actriz de éxito, su carrera pudo quedar truncada incluso sin haber comenzado. Así lo ha relatado la propia afectada en el podcast ‘Second Life’ que conduce Hillary Kerr donde la californiana ha contado una sorprendente historia de su periplo a comienzos de los años noventa en París cuando apenas tenía 20 años.
“Yo había conseguido ahorrar suficiente dinero para ir a París, compartir piso con una chica que sigue siendo una de mis mejores amigas e intentar buscarme la vida como modelo. Sin embargo, estuve allí un año y no trabajé ni un solo día”, comenzaba explicando Diaz, que hace pocas fechas anunciaba su regreso a la actuación junto a Jamie Foxx en Back in action tras ocho años de parón.
“Lo único que me ofrecieron fue algo que creo que consistía en trabajar como ‘mula’ para llevar drogas a Marruecos, lo juro por Dios. Fue a principios de los 90 y me dieron una maleta cerrada con llave en la que se suponía que estaba la ropa con la que debía desfilar en ese país”, añadía la actriz.
Una chica rubia en Marruecos
Sin embargo, solo cuando llegó a su destino, las dudas comenzaron a sobrevolar su cabeza. “Soy una chica rubia de ojos azules en Marruecos. Llevo pantalones vaqueros rotos y botas de plataforma, con el pelo suelto… Me sentí insegura y abandoné la maleta tras confesar que el contenido no era mío a las autoridades del aeropuerto”, concluía Cameron Diaz consciente de que se libró de una condena por tráfico de drogas.
Afortunadamente, no mucho después de aquella rocambolesca historia, consiguió el papel de Tina Carlyle en la La Máscara (1994), protagonizada por Jim Carrey, y que se convertiría en el trampolín que necesitaba para darle un impulso definitivo a su carrera.