Madeleine McCann desapareció de un resort de Praia da Luz, Portugal, en mayo de 2007. Tenía tres años y nunca se supo qué exactamente pasó con ella.
Los detectives de la Policía inglesa hace más de 7 años están investigando la desaparición de Madeleine McCann y hoy buscan a un hombre que podría resultar clave para finalmente resolver el caso, no han develado el nombre pero si afirmaron que dispuesto de 100 mil dólares, prometiendo que este nuevo testigo podría aportar la solución sobre el misterio que tiene como víctima a la pequeña Maddie.
Nicola Wall, el Inspector en Jefe que dirige la investigación, cree que este hombre podría ayudar a dar un cierre a la dramática historia que conmueve al Reino Unido y al planeta. Mientras que por su parte, los padres la pequeña, Kate y Gerry McCann cree que su hija aún está con vida.
Se trata de un hombre que fue identificado por los investigadores y que estuvo en la misma área en que fue vista por última vez la niña inglesa. El hombre trabajó en el exclusivo resort Ocean Club del que desapareció Madeleine y podría saber qué ocurrió esa noche en las instalaciones del lugar.
“Es el último lanzamiento de dados”, indicó una portavoz del Ministerio del Interior, la dependencia oficial que administra y dispone de los fondos para las investigaciones policiales. “Hay sólo un hombre con el que los detectives quieren hablar que estaba cerca del área donde desapareció Madeleine casi 10 años atrás. Una búsqueda internacional se lanzó para encontrarlo”, agregó.
Completamente Insólito: Un hombre, identificado como Pablo Calatayud, fue detenido tras asesinar a su amigo Gastón Javier Altamirano, el hombre lo habría apuñalado tras confundirlo con el “Pombero” criatura mitológica de nuestro folclore guaraní.
Luego de dos semanas de búsqueda, la policía detuvo al principal sospechoso del asesinato de Gastón Altamirano, que fue asesinado de 20 puñaladas en un taller mecánico en Quilmes, Argentina, el pasado 24 de octubre.
“Fue Pablo” mencionó la víctima con su último aliento antes de perder el conocimiento. Haciendo referencia a Pablo Calatayud, amigo y compañero de trabajo, que luego escapo del lugar y le robo 300 mil pesos argentinos.
Tras ser detenido, Pablo confesó que lo mató porque estaba muy drogado y lo confundió con el “Pombero” figura mitológica de nuestro folclore guaraní.
Llega la navidad, y con ella la gastronomía típica navideña de nuestro país.
Chipa guasu, sopa paraguaya, lengua a la vinagreta, vitel toné, son comidas que no pueden faltar en la mesa de ningún paraguayo. Así también hay países que tienen platos tradicionales para dicha fecha. Te comentamos de algunos.
Pollo frito y Christmas cake (Japón)
Hace 50 años comenzó la tradición del pollo frito en las mesas de las más de 3.5 millones de familias en Japón, lo cual es habitual ver largas filas de japoneses delante de los locales de venta de pollo frito. Esto va acompañado de un postre llamado “Christmas Cake” también conocido como “Kurisumasu Keki”. Se trata de un pastel esponjoso cubierto con una gruesa capa de nata montada y decorado con fresas frescas, que, aunque no resulte especialmente buena ni barata, es tan típica que pocos japoneses nunca se la pierden.
Fatta (Egipto)
La Fatta, también conocida como “Fattah” o “Fatteh”, es una comida típica egipcia que no puede faltar en las fiestas y mucho menos en la navidad. Es un plato hecho principalmente con sopa de carne, pan crujiente, arroz y su salsa.
La navidad se celebra en Egipto el 7 de enero, pero las iglesias se decoran el 25 de diciembre con árboles de navidad y cintas festivas de colores.
P*tos (Filipinas)
Por más sorprendente que sea, en Filipinas, un “P*to” o “Kue Putu”, es un plato tradicional que consumen los filipinos en noche buena. Consiste en un pastel de arroz cocido al vapor. Este método de cocción es muy usado en el país, junto con el hervor y el asado, y se incorporó a la cocina filipina a través de otras cocinas asiáticas.
Hay muchas recetas, que varían desde el tipo de arroz utilizado al método de preparación del mismo. En su forma tradicional, el puto es de color blanco y de textura lisa.
Cola de Mono (Chile)
Chile posee una tradición semejante a la de nuestro país. Sin embargo, existe una bebida de mucha tradición para los chilenos. Se trata de la “Cola de mono” que es una bebida tradicional de épocas navideñas en Chile. Se prepara a base de un aguardiente de uvas llamado pisco, pero se puede sustituir con otro tipo de aguardiente o vodka. Además, también lleva leche, azúcar, café y algunas especias para dar sabor, tales como la cáscara de naranja, la canela, los clavos de olor, la vainilla o la nuez moscada.
El nombre de esta bebida tiene varias teorías sobre su origen, la más popular es que se vendía en una botella de Anís del Mono, la cual lleva una etiqueta con el dibujo de un mono con cola muy larga; aunque también se le atribuye a un expresidente chileno llamado Pedro Montt por su apodo “el mono Montt”.
Arroz Jollof y el Arroz Frito (Nigeria)
Dos platos típicos que no pueden faltar en las Navidades nigerianas son el arroz jollof y el arroz frito. De hecho, el arroz es dueño y señor de multitud de platos navideños de Nigeria.
Dos platos típicos que no pueden faltar en las Navidades nigerianas son el arroz jollof y el arroz frito. De hecho, el arroz es dueño y señor de multitud de platos navideños de Nigeria. Y en cuanto a carne, también se suele comer pollo, carnero, cabrito o ternera, además del típico pavo.
Cuando dio a luz a sus dos primeros hijos, fue a un médico que le aseguró que tenía los ovarios grandes, fuera de lo común, por lo que le recomendó que no tome pastillas anticonceptivas ya que podría causarle problemas de salud.
Mariam Nabatanzi es una mujer oriunda de Uganda, un país donde las familias ofrecen a sus hijas para contraer matrimonio a cambio de beneficios. Se casó a sus 12 años y desde ese momento fue mamá reiteradas veces.
Un año después de su casamiento dio a luz a mellizos, luego siguieron cinco pares de mellizos, cuatro de trillizos y cinco de cuatrillizos. En total llevó adelante más de 16 partos, donde tuvo a 44 hijos, de los cuales seis de ellos fallecieron.
Cuando fue madre por primera vez, de sus dos hijos, ella fue a un médico que le aseguró que tenía los ovarios grandes, fuera de lo común, por lo que le recomendó que no tome pastillas anticonceptivas ya que podría causarle problemas de salud.
En 2016 Mariam fue abandonada por su marido, quien la dejó sola con sus 38 hijos a cargo. Hoy en día viven en cuatro casas hechas de bloques de cemento y con techo de hierro corrugado al norte de Kampala.
En tanto, según relató a The Sun el Doctor Charles Kiggundu, ginecólogo del hospital Mulago, ubicado en Kampala, capital de Uganda, sostuvo: “Mariam presenta un caso de hiperovulación, es decir: cuando una mujer produce y libera más de un óvulo en cada ciclo menstrual de forma natural. Aunque ya no podrá tener más hijos, porque un médico le cortó el útero desde adentro”.
En un momento desesperado para conseguir dinero y así poder mantener a sus hijos, la mujer trabajó en distintos rubros como: peluquería, recolección y venta de chatarras, decoración de eventos y venta de hierbas medicinales.