César Caballero, abogado de la familia de Lidia Meza, asesinada por el narcotraficante brasileño Marcelo “Piloto” Pinheiro, dijo que el ingreso de la joven a la Agrupación Especializada no habría sido gestionada por ella misma sino que, detrás de la cita, estaría una “red de trata”, en la que estarían implicados policías.
En ese sentido, indicó que hay varias aristas que aún no se han esclarecido, como quién permitió la entrada de Lidia a un lugar que se supone que es de máxima seguridad, quién le consiguió el trabajo de acompañar a Marcelo “Piloto” Pinheiro y, especialmente, quién le dio aviso a una joven identificada como Soledad Sotelo, la joven que fue a bordo de un coche de una funeraria hasta la casa de la víctima fatal a dar aviso a los familiares sobre lo ocurrido y quien hasta se había comprometido a pagar los gastos del sepelio, según señaló Caballero.
Criticó que el Ministerio Público no haya iniciado ya una investigación profunda del caso, como pedido de informes a la Agrupación Especializada, identificación de personas, ni mucho menos haya convocado a autoridades del cuartel policial para declarar. De hecho, mencionó que la familia de Lidia tiene muy poca información sobre lo sucedido.
“No puede ser que a cinco días de lo ocurrido aún no haya un solo imputado en el caso”, cuestionó el letrado.
En ese orden, el abogado indicó que los policías que estarían implicados en el caso deberían ser investigados, como mínimo, por homicidio doloso en carácter de complicidad. Indicó que más adelante también deberían ser imputados por trata de personas.